El uso del horno de microondas en los últimos años se ha expandido considerablemente, y para muchos, resulta un elemento básico en sus cocinas. El uso más común que le damos es para recalentar la comida o calentar agua, pero lo cierto es que puede ser de mucha ayuda para preparar algunos alimentos de una manera rápida, eso sí, siempre que se use adecuadamente.
En los últimos años, una de las tendencias que se ha visto acrecentada es la preparación de pasteles individuales o mug cakes, pero también podemos cocinar tocino, quichés, avena, huevos y hasta galletas. Por ello, hoy hablamos de cosas que hay que tener en cuenta al cocinar en el horno de microondas.
No siempre tienes que utilizar la configuración de potencia alta
La configuración de la potencia de nuestro microondas debería estar en nuestros conocimientos básicos, pero lo cierto es que usualmente ajustamos una vez la más alta y nos olvidamos de ella. Lo que debemos saber es que cuando bajamos la potencia logramos que nuestra comida preparada en el microondas tenga un mejor sabor.
Ahora bien, la potencia alta es bueno utilizarla cuando calentamos líquidos o cocinamos alimentos firmes y gruesos como las papas, y para alimentos que se cocinen rápido como los mug cakes. La potencia baja es mejor usarla para alimentos delicados que pueden sobrecocerse rápidamente, como los huevos y los vegetales pequeños, y también funciona bien para deshidratar ingredientes.
Puedes usar plástico autoadherible
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, podemos usar envoltura de plástico autoadherible siempre que esté etiquetado para usarse en microondas. En este sentido, la recomendación es siempre dejar suficiente espacio entre la envoltura de plástico y la comida, de modo que no toque los alimentos durante la cocción.
Hay una manera correcta de recalentar en el microondas
Este punto seguro te va a sorprender: la manera en que colocas los alimentos en el plato del microondas afecta el cómo se recalientan. La gran mayoría, está acostumbrado a apilar toda la comida en el centro del plato, y justo esa es la manera incorrecta de hacerlo. Lo mejor es esparcirla en un círculo, procurando ocupar la mayor superficie del plato, pero dejando un espacio abierto en el centro.
Los vegetales también pueden cocinarse en el microondas
Cocinar en el horno de microondas es una de las mejores maneras de preparar nuestros vegetales, pues las microondas calientan rápidamente con el mínimo contacto de agua, de tal manera que los vegetales retienen aquellos nutrientes que son solubles en el agua y que usualmente se pierden al hervir o blanquear.
Aprende cuando es necesario reemplazar tu horno de microondas
Dice un dicho popular que "todo por servir se acaba y todo acaba por no servir", y los hornos de microondas no son la excepción, pues no son fabricados para dilatar eternamente. Si notas que el horno de microondas está cocinando más lento de lo normal o hace ruidos sonoros y el teclado no funciona como debería, es tiempo de ir pensando en el reemplazo, considerando además, que hoy en día resultan más económicos que repararlos.
Otros puntos por los que hay que reemplazar el horno de microondas es la presencia de olor a quemado, chispas o humo, lo cual indica que hay un problema serio y urgente. El que la puerta no selle correctamente es otro motivo, pues debe serrar para contener la radiación, por lo que también es un tema de seguridad. Por último, si tiene más de 10 años, debemos pensar en cambiarlo, pues las tecnologías han cambiado para un consumo de energía más eficiente.
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