Muchos de los recuerdos culinarios me remontan a mi época de infancia cuando mi madre nos cocinaba los fines de semana y nos reuníamos toda la familia alrededor de la mesa a compartir las delicias que nos preparaba. Si pudiera regresar el tiempo a esa época quizá por tan solo unos días, lo haría.
Entre esos recuerdos esta la receta que haré hoy con estos camarones a la diabla que son verdaderamente deliciosos. Por lo general suelen ser bastante picosos, sin embargo si no los quieres muy picantes puedes desvenar bien los chiles y así bajarle la intensidad.
Primero vamos a poner a hervir por 15 minutos los camarones en agua con sal, retirarlos del agua, pelarlos y reservarlos para lo que sigue. Ahora vamos a poner en una olla con agua y por unos cinco minutos los chiles con uno de los jitomates. Los sacamos del agua y nos quedamos como con dos tazas del agua en la que estuvieron los chiles. Desvenamos los chiles de ser necesario (en caso de no querer la receta muy picante) y pelamos el jitomate. Vamos a colocar éstos ingredientes en una licuadora junto con el diente de ajo y un vaso del agua. Licuamos bien y vamos ajustando con el segundo vaso con agua hasta obtener un caldo medianamente espeso.
Picamos la cebolla y el jitomate y los ponemos en un sartén con un poco de aceite vegetal por unos cinco minutos. Le agregamos los camarones y el caldo de chiles que acabamos de hacer. Lo revolvemos súper bien y dejamos en la lumbre a fuego medio por unos diez minutos.
Con qué acompañar los camarones a la diabla
Los camarones a la diabla se comen calientes. Los puedes servir con un arroz blanco y unas ricas tortillas de maíz recién hechas. También los puedes acompañar con una cerveza clara muy fría o con un vino blaco seco.
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