Uno de los cortes de carne que más disfrutamos en esta cocina en cualquier receta es el de la chuleta de cerdo. Su sabor va muy bien en recetas guisadas, en salsas cremosas, con piña, verduras, salsitas y hasta en taquizas. Hoy compartiremos cómo hacer chuletas de cerdo en salsa verde para comer toda la semana.
También te vamos a dar nuestros mejores consejos que puedes aplicar para evitar que tu salsa de tomate (y hasta de jitomate) no quede ácida, y si ya lo está aún puedas arreglarla y que quede como si nada hubiera pasado.
¿Cómo quitar lo ácido a la salsa verde?
Asegúrate de que los tomates estén bien lavados para quitarles esa textura pegajosa que recubre la piel. También recuerda escoger tomates verdes maduros.
Dependerá del gusto de cada quien, pero puedes tatemar los tomates antes de preparar la salsa, esto hará que el sabor ácido se minimice.
El consejo de oro es agregar una cucharada de bicarbonato de sodio mientras los tomates se cocinan previos a molerse, esto balancera el pH del tomate y jitomate.
En caso de que ya se te haya pasado la oportunidad de solucionarlo en alguno de estos pasos anteriores, puedes balancear el sabor agregando un poco de azúcar morena. No te preocupes, esto no alterará el sabor, solo quitará el sabor ácido.
Sazona las chuletas con sal, pimienta molida y ajo en polvo.
Fríe en aceite caliente mientras se hierve 1 kilo de tomate y dos chiles serranos.
Licúa los tomates con 3 dientes de ajo, 1 taza de cilantro, 1/4 de cebolla y sal de grano al gusto.
Una vez que las chuletas estén doradas por ambos lados, vierte la salsa, sazona por 15 minutos más y listo.
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